Solo la leve desviación del bordillo, rompiendo su continuidad, despierta de la magia que provoca esa imagen y en la que el cerebro se deja seducir más allá de lo meramente especular. Se diría que también confluyen el tiempo y la historia en tal juego de imposibles coincidencias.
Estimados, una vez más se confirma que los reflejos son amigos de los fotógrafos. A veces esto es como componer con Lego: con un poco de paciencia se puede obtener resultados que uno no esperaba.
8 comentarios:
Parece un retrato ese reflejo.
Y aunque el indicio es mínimo, da la impresión de ser una zona céntrica de la Ciudad.
Saludos Pedro.
Solo la leve desviación del bordillo, rompiendo su continuidad, despierta de la magia que provoca esa imagen y en la que el cerebro se deja seducir más allá de lo meramente especular. Se diría que también confluyen el tiempo y la historia en tal juego de imposibles coincidencias.
Un cordial saludo.
L'infatigable marcheur urbain que tu es, EC Pedro, réunit ici l'oeil et l'acte instantanné de prendre la photo - pour notre plus grand bonheur. Bravo
Un salut parisien
Qué estupendo truco óptico. No se sabe en realidad si los soldados están en la calle o son un cuadro en la pared...
Una foto genial. Lástima que en el cuadro-espejo no salga una bella mujer caminando en vez de los dos regordetes "milikos".
Saludos.
Muy buena composición. Pero fuerte fuerte es la combinación del añil con el naranja :) (¿La Candelaria?)
Saludos!
Estimados, una vez más se confirma que los reflejos son amigos de los fotógrafos. A veces esto es como componer con Lego: con un poco de paciencia se puede obtener resultados que uno no esperaba.
¡Muchos saludos!
Me encanta, además me recuerda la Candelaria...
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