lunes, abril 16, 2012
Día 810
Así es la llegada al centro de Bogotá, que despista a los visitantes, pues al ver los cerros orientales se sienten (no sin razón) en la periferia, por lo menos geográfica. A propósito, el este de la ciudad queda en realidad al sur y el oeste, al norte. De resto, normal.
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4 comentarios:
Así es la "normalidad" en las Ciudades.
Saludos Pedro.
¡Por no hablar de la idea luminosa de construirlas sobre lagunas! En fin, no fue tan sencillo: pero en las ciudades se siente de manera muy directa la acción de los antepasados (un papel que un por cierto recaerá en nosotros: seremos 'la gente de antes'). Qué cosas tiene la vida.
Saludos marcianos.
Creo que cada vez menos, pues esas ideas luminosas se van corrompiendo debido a la imperiosa necesidad de los gobiernos por ser los #1 en construcción de metros cuadrados para oficinas; no sé allá, pero el de acá se jacta de eso.
Saludos pasados por agua.
Pedro y sombras alargadas... me recuerda a Delibes y a su primera obra. Una imagen que se me antoja llena de sobria solemnidad. También.
Saludos.
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