viernes, noviembre 12, 2010

Día 349

La bicicleta podría a mi juicio recibir el premio Mejor Invento de Todos los Tiempos. Como bien lo anotó Apollinaire, sublima la realidad de la marcha humana agregándole un eje cíclico, que podría de hecho ser el adelanto de una sana evolución biológica. Este medio de transporte, de ocio y de expresión es el ejemplo que el poeta emplea para hablar de la 'surrealidad', el término del que luego se desprendería el movimiento surrealista.

2 comentarios:

El peletero dijo...

Sin duda la evolución biológica natural es la simbiosis del cuerpo con la máquina, prefiero eso a la perturbadora genética.

Los artefactos mecánicos siempre me han producido ternura.

Arquímedes tenía razón cuando pedía un punto de apoyo para mover el mundo, la bicicleta es buena prueba de ello, aunque aquí, en Barcelona, ya está desalojando, como si fueran elefantes y con la pedantería y la jactancia del ecologista, a los peatones.

Saludos.

Anónimo dijo...

Ceci n'est pas un blog sur le SURREALIMSE. C'est purement mathématique, car automobile + ville = imbécile, ou bien imbécile = ville / automobile. On peut conclure que le CYCLIMSE s'oppose à l'IMBÉCILIMSE. Nous comprenons donc que la SURREALITÉ (surrealidad) c'est la CYCLITÉ (ciclidad) Donc, dans l'atoll de Pom-Pom-Gali... bon j'arréte de fumer.